Mi cuerpo toma la vía estrecha
por este sendero van las vacas en silencio
ellas no llevan arrieros sino que se desplazan
un temor sofocante les señala el camino
la yerba seca por el sol agrieta su mirada
soy una de esas vacas todas ellas soy yo
caminamos juntas con el olor de la palabra triste
ellas en el lomo/ yo en la espalda
Nada es diferente cuando debemos cruzar
la vía de espinas trazadas con alambres
la vaca no puede decir nada/ menos yo
Ella camina y voy detrás paso a paso
nos vigilamos a ver quién se atreve a decir algo
clava sus ojos como alfileres en mi rostro
De repente / se queja de no poder decir
por este sendero van las vacas en silencio
ellas no llevan arrieros sino que se desplazan
un temor sofocante les señala el camino
la yerba seca por el sol agrieta su mirada
soy una de esas vacas todas ellas soy yo
caminamos juntas con el olor de la palabra triste
ellas en el lomo/ yo en la espalda
Nada es diferente cuando debemos cruzar
la vía de espinas trazadas con alambres
la vaca no puede decir nada/ menos yo
Ella camina y voy detrás paso a paso
nos vigilamos a ver quién se atreve a decir algo
clava sus ojos como alfileres en mi rostro
De repente / se queja de no poder decir
teresa coraspe, Ciudad Bolívar.
3 comments:
Teresa:Con el olor de la palabra triste en el lomo y vos en la espalda...la famosa mochila.
Me resulta triste y meláncolico, ese andar por el campo-como la vida, con la mirada fija en la meta-final, sin poder decir una palabra.
Excelente Teresa.
Gabriela Abeal
Pero tiene mucho que ver con la realidad de nuestro país; cuando asesinan a las personas que tienen sus fincas y sus animales sueltos en ellas; tiene que ver con ese silencio que se nos quiere imponer, y ninguna otra metáfora para decir silencio que el mutismo de las vacas cuando van al caer de la tarde hacia donde las llevan. De repente fui una con ellas. Y es que la poesía, para mi, está en todas partes; como un Dios iluminado. Gracias por nuestra amistad, uno aprende de la vida con las amistades, Gabriela. Y sigo con el poema tuyo, en Gmail. Tere o Lou, es igual.
Teresa: Mejor o no se si es mejor, no me voy a poner hablar de las realidades de los lugares donde vivimos.
Es verdad somos a veces ese ganado que camina sin decir una palabra y seguimos,vaya uno a saber hasta cuando.
Soy de la creencia que toda persona que se cruza en nuestro camino, hasta la de la cola del mercado trae con ella un mensaje, algo que debemos saber o queríamos saber, solo hay que estar en sintonia o equilibrio para captarlo, no muy fácil lograr eso en estos tiempo, pero tampoco imposible.
Y seguís con mi poema, tal vez debía decir algo? mirá que yo a veces soy la señora despiste, cuando llega algo mío a tus manos estás autorizada hacer lo que te plazca, por si mi memoria o apuros me hacen olvidar de contestar o responder algo.
Bueno Tere o Lou ya me acostumbre a Teresa, que tengas una bella noche y mejor despertar.
Gabriela.
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