Saturday, June 30, 2007

NINA REIS (Brasil)

Poemas de Nina Reis del libro: TODAS LAS MANZANAS DEL PARAÍSO.
(Una visión más completa de su poesía)



I - Génesis

24
Otra vez las mariposas invadieron mi casa
y yo quedé avergonzada
fui hasta su cuarto
y vi que presas en el techo
las mujeres bordaban los capullos.
Mi silencio cabía en cada hilo.
En consecuencia
mil pedazos de mariposas envejecidas
caían.
A veces insomne espero su llegada
y el vapor de sus pies viene primero.
Abro todas las cortinas
y la sombra desnuda de su torso
entra.
¡Ven!
Siéntate en el almohadón
casi destruido por el tiempo.
No hay miel ni incienso
todas huyeron llevándose las pajas y el fuego.
¡Ven!
Siéntate en la casa prometida
los higos ya están maduros
yo misma preparo el baño.


DESVELO

25
Salomón me hizo cantar en la casa vacía
cuando desconcertada y triste
-como un recién nacido me
miraba en el espejo.
¡Ven!
Siéntate en la casa de azules mariposas
rápido
porque la luz está trémula.
Un viento fresco crecerá en mí
¡Ven!
Siéntate en la casa nueva
espera el canto de la cigarra
porque adorné mi cintura e invité a las mariposas,
la luz quedará opaca después de algunas lunas.


SILENCIOSO BATIR DE ALAS


No hay reloj en mi casa
los fantasmas andan sin prisa
y cuidan de sus secretos.
Nadie separa las túnicas ni los turbantes
porque todo está lejos de las manos.
La araña teje sola.
No hay reloj en mi casa
Sirvo el té cuando todo está perfecto
y la luz no es sólo un detalle.



26
¿Dónde se escondió su espíritu?
De madrugada los juncos sentirán frío
y las lagartas maldecirán el día de su nacimiento.
(Me consuelo a escondidas.)
Casualmente descubrí que la lluvia abortó
y estaba próxima la muerte del geranio.
No escucho más el agua
ni tengo compasión de los muertos.
Estoy cansada
pero nadie corta su propia carne
con mano cerrada y huérfana.
Libres son las mariposas
que me consuelan en silencio.
Mis senos amamantaron una boca pagana
Mis labios adoraron un unicornio.
Libres son los pensamientos que ya pecaron.
Locas son las palabras susurradas
27
II - Redención y éxtasis
CAPULLOS
Una procesión de mariposas entró.
Eligieron esta tierra como testigo de mi desdicha.
Las luciérnagas cambian los días por las noches
e idolatran a las ninfas creadas de la promesa.
Me ofrecieron como sacrificio,
por mi culpa sus pies estaban heridos.
No contengo el llanto
y un desconsuelo quema mi boca.
Las mariposas se fueron y se multiplicaron.
El cielo y la tierra no se mezclan.
Me visitó un profeta y temí por su palabra.
Rompí el odre macerado de vino.
Yo era vieja cuando los serafines
vinieron a lavar sus alas
y me encontraron llorando.
Cerraron la puerta y se llevaron las llaves,
Todavía vi, en el reflejo de la luz,
una mujer pariendo mariposas.
NACIMIENTO

28
Las mariposas giran en círculo en la pálida noche.
Las flores parecían dormir con los ojos abiertos.
Después del invierno
las crisálidas presas
y las margaritas hambrientas.
Llovió sobre las huellas del benteveo
que anunció el crepúsculo.
El sándalo determina su llegada.
Está hermosa la noche.
Apresurada olvidé las sábanas
cubrí la cama con hojas de canela.
Mi vientre creció como la luna llena.
Nadie me vio tejer, ni desear dátiles.
Mi alegría cargaba viento.
El mamboretá suplica en mi nombre
pues conoce el secreto.
Mi corazón estaba afiebrado y mi boca seca.
Un rayo me atravesó e hizo brotar una fuente.
Abrí mis piernas
escuché el gemido del río
que corría por debajo del puente.
Mil mariposas abrigué en mis brazos.
Estaba amaneciendo.

DANZA

29
Centenas de mariposas danzan
cautivas de mi sueño.
Otras tantas vinieron de las profundidades
del cielo y de las aguas.
En la alas moradas y duras traían a mis antepasados
que se mezclaban al eco de mi presencia.
Mi abuela llegó transparente y fría
trayendo en las manos sus manuscritos.
Precisa entender que nada es definitivo.
Centenas de mariposas danzan
con alegría y gozo vieron a mi padre
cuando atravesaba la puerta. Todo parece ausente.
Soy la heredera.
Me fue concedido reposar en su regazo.
Él me presentó como testigo y confía.
Centenas de mariposas danzan
crisálidas de mi sueño.
Piadoso es el aire que las alimenta
cuando el fuego les consume las entrañas
y la palabra es misterio.
Bendita luna honra a esta mujer
porque nadie sabe su nombre
sólo las mariposas que peregrinan y danzan
partiendo la noche en quimeras.


30
Un ejército de libélulas vigila la puerta.
Estoy callada
porque las palabras se disolvieron como polvo.
Antes yo era la esposa del profeta.
No me acostumbro a las rejas en las ventanas
ni al olor acre que arde en la piel.
Construí un abismo donde escondo mi última
sombra.
Cuando yo era pequeña
tenía miedo del cuco.
En la oscuridad, entonces
dormía entre las piernas de mi tía.
Hoy a mi lado duerme una luna poeta
cargada de sueños, imágenes y trovas
que comparto con otras lunas mujeres.
Las moscas son testigo del dolor
que dejo caminar en los pies de mis hijos.
Hace tiempo que no veo el arbol de la llama
con sus vainas maduras
no siento el perfume de Isis
ni hago el amor en una cama de romero.
COMPARTIR

31
Acaso sobrevivo amada por otras.
La hora del regreso está lejos
y el otoño envejecido de días negros.
¿Quién me estará esperando?
La ciudad me asusta,
parí antes de tiempo fetos con las bocas azules.
¿Quién me estará esperando?
La lluvia moja los poros abiertos,
antes que se abran los paraguas.
Con el mirar perdido por detrás de la bruma
lloraré litros de agua todavía más salada.
¿Quién me estará esperando
cuándo encuentre al cazador de mariposas?

Tuesday, June 26, 2007

Relato de DINAPIERA DIDONATO, venezolana residente en los EE.UU.

Para Riolama en su cumpleaños

Aquí estoy, con la noche, dice bellamente la poeta que a veces me escribe. Recuerdo a una mujer que quise mucho y que me buscaba en sus insomnios para que le contara cuentos de mi abuela.

Volvía a ponerse de moda Omara Portuondo que al principio la calmaba, detrás del insomnio vino un diagnóstico y más atrás mis hermanos que organizaban mi salida del país porque ya ella no me necesitaría más y era inútil publicar estas cosas después de la renovación que aportó Milagros Mata Gil a Casas Muertas, un clásico de bachillerato de los años setenta. Ya nadie quiere oír hablar de mereyales transplantados a una vereda de Coche y reencontrados en el jardín botánico del Bronx, detrás de una escultura de vidrio de Dale Chihuly.

Pero la poeta me cuenta que borraron el Paso Caruachi del territorio nacional, y yo que tanto conté de las culebras en el paisaje amarillo, desvistiéndose en el matorral de mastrantos cerca del agua, y sólo había que esperar un poco. Caruachi aparecía como un resplandor. A quién le importa si nunca logramos sorprenderlas desnudas al momento de la muda pero sí escuchábamos sssssss el trazo, el viento de las culebras con las bocas llenas de flores verdes y luego alguien levantaba con una varita el traje bien muerto, generalmente mi hermano Adolfo.

A veces me despierto en medio de la noche como si nunca más pudiera vestirme y vuelvo a quedarme inmóvil, única forma de llorar que conozco y no sé cuando empecé a amanecer con esa idea fija de convencer a Adolfo y a la poeta amiga de algo que ni yo misma logro saber.


Silencio que están durmiendo los nardos.. yo también sigo despierta y de la gran nube de polvo amarillo mi abuela salió, dijo solamente tengo la fatiga. Adolfo de cuatro años, y yo de cinco y medio, inmóviles, me da la mano, en la otra la espada del rey Arturo tallada en madera por mi abuela siguiendo el dibujo del libro de comiquitas. El carro negro de viajes colectivos por puesto, de Pantera, el chofer trinitario gigante como su carro, había sonado la sirena y todo el mundo se asoma a la calle. Sabíamos que era Pantera porque su corneta sonaba La Cucaracha, La Cucaracha, Ya no puede Caminar a diferencia del resto de los carros que solían sonar Yo nací en esta ribera del Arauca, pero no se veía nada, todos quedamos automáticamente bañados del polvillo, fue cuando Adolfo me apretó la mano y con la otra agitó la espada hasta que ella cruzó la puerta tan derecha con esa tensión únicamente posible cuando sabemos que estamos a punto de caer y la familia la siguió menos nosotros que corrimos a cerrar la puerta justo a tiempo de impedir que la niebla de polvo invadiera la casa.

Y ella ahora curvada estuvo recostada unos minutos con el pecho silbándole. Adolfo todavía llevaba puesto el sombrero de moriche tejido por ella y que usó en el recibimiento y le estuvo explicando los detalles a Anselmino de nueve meses que todo se lo perdía por andar distraído gateando al lado de su mascota el bebé cunaguaro Ecco-Fido-Che -Viene en esos juegos de a ver quién araña más duro en los que se daban mutuamente el tetero para horror de la madre que apenas si abría grandes los ojos, más callada que un retrato donde dejó de sonar la música de Cuba con la que me había traído al mundo. Fue como si hubiera empezado a llover sin aviso, en su cuarto, dijo Adolfo, que no podía pronunciar la palabra trueno, abuela, que todavía llevaba su traje de viaje cubierto de polvo y los zarcillos de escarabajos de oro de mil patas que saltaban, yo sé que Adolfo también está mirando cómo le tiemblan los zarcillos por el esfuerzo ahora que ella ha levantado la mandarria sobre cada una de las cosas suyas.

Uno a uno los frascos de agua florida y un Chanelnúmerocinco sin destapar desde hacía años, la botella de licor de murano rojo, los daguerrotipos en sus bases de madera, la góndola veneciana que siempre nos pareció una urna, las polveras de carey con flores de tela y pistilos de perlitas, la botella de emulsión de Scott sin aditamento de vitamina A y D como las de ahora, la india Rosa de yeso pintado, el tubo grande de la morrona en aguardiente que ella misma agarró descuidada colgando del pomo de una puerta, el disco de Un cisne más blanco que un copo de nieve. El del Popule Meu, recuerdo de la feria del Bicentenario, voló por todo el cuarto como un bumerang, nos agachamos detrás de la cortina que ya estaba a medio caer, nos salpicaban los pies las astillas de las piedras de los anillos y el nácar de las cajas chinas de música. Lo más difícil era desbaratar las patas de la Singer con sus margaritas pintadas en dorado que una madama compasiva le envió una vez del norte, tú una artista, darling y a los artistas no les falta Dios, el cordón marrón saltó y la rueda daba vueltas y vueltas y la mandarria no podía, la madera saltó primero, los carretes de hilo de colores rodaron como metras de alcanfor. Pronto saltarían los huesos en su saco que nunca faltaba en la barriga de una máquina de coser si los sastres desobedecían la costumbre de coser sólo de día.
Después se vaciaron las cómodas, los espejos del escaparate ya estaban sonando, los botones de nácar se estrellaban contra el techo y el copete de la cama saltó como una concha destapada. Faltaban los santos con su altar completo. Adolfo y yo salimos del escondite cuando ella soltó la mandarria y se sentó en medio del desastre. Seleccionó una maleta donde guardaba la foto de una mujer que nadie conocía y le vimos meter el chinchorro, el vestido de su entierro, dijo, en un descuido yo metí uno de sus zapatos de raso pulludos, nada más de jugar porque era un recuerdo del son cubano. Iba a meter al Dr. Joségregoriobendito cuando Adolfo me haló fuera de la cortina, recostó la espada contra la rueda de la máquina que dejó de girar, y se quitó el sombrero para depositarlo en la maleta. Dijo, yo también me voy. Entonces mi abuela lo vio y decidió quedarse.

Pero Adolfo es quien cierra mi maleta ahora no sin antes echar un frasco de conservas de frutas en forma de corazón que son mis preferidos, los anacardium de las playas que ya no existen, y echa uno a uno mis manuscrito nunca publicados por una vida ocupada en poner a raya las fatigas y solamente me dice no vuelvas.

Saturday, June 23, 2007

RAFAEL RATTIA, Crítico literario, Venezuela.

Teresa Coraspe y el Vértice del Círculo

Similar a la enigmática esfera pascaliana; cuyo centro está en todas partes y cuya circunferencia en ninguna: así es el Vértice del círculo de la escritora anzoatiguense Teresa Coraspe. Se trata de uno de los primeros libros publicados por la escritora a finales de la década de los ochenta bajo los auspicios de la Gobernación del Estado Bolívar. La edición que tengo en mis manos es una edición escandalosamente sobria y diría más bien que discreta. Con una llamativa portada de Freddy Carreño que nos obsequia a los lectores un motivo de inequívoca impronta cinética. Leyendo este tercer libro de la escritora puedo darme cuenta de un aspecto sumamente importante en el programa poético de Coraspe en el cual no había reparado cuando leí sus otros libros: La preocupación estética por pensar el logos. El problema central de la razón sensible en la concepción del poema. La actitud no sólo contemplativa del poeta ante los misterios del mundo, sino la postura interpretativa y de activo discernimiento que adopta la escritora en sus textos poéticos. No solo intuitiva es su creciente poesía, además hay en sus poemas mucha angustia por el insoslayable acto de reflexionar el por qué, el cómo, y el para qué de escribir acerca de los temas que ocupan la atención de la filosofía.
La poeta no desea estar en este mundo y proclama su deseo de construirse un mundo aparte, un universo novedoso y más cónsono con sus complejas y muchas veces incomprensibles expectativas que como creadora se le revelan en el decurso de sus meditaciones trascendentales. Su radical inconformidad con la realidad instituída la lleva a postular una inaplazable necesidad de inventarse una compañía que no la defraude: el poema. Gracias a la poesía Teresa Coraspe no sucumbe a los estragos que causa la soledad y la tristeza que impera en el mundo como reyecía. Por doquier abunda una pastosa soledad que derrota y aflige a los espíritus más pétreos que se ufanan de poder soportar el fardo de la incomunicación, del estruendo del no-decir. Esa ausencia lancinante que hiere y lastima está presente en la poesía de la escritora como un leit motiv que no la abandona jamás. Esta poeta no solo piensa con imágenes sino también con conceptos cuyo laconismo nos obliga a repensar las formas tradicionales de leer el poema. La lejanía, la ausencia hiriente del ser, el río con su presencia ida para siempre; el creciente bajo la luna, el dolor de ser tan sólo una sombra de otra sombra coloca al lector de esta poesía de Coraspe en aprietos para comprender la esencia última de su inusual concepción del mundo por la imagen verbal. La mirada es un componente fundamental en toda la obra poética de la poetisa. En alguno de sus libros dice: me bebo el infinito con los ojos. Sólo así puede decirse algo tan bello, tan perturbadoramente hermoso. La instantaneidad del rayo es lo más parecido a un poema de Teresa Coraspe: El río a lo lejos recibe lluvia y crece /desde aquí lo miro/ las piedras impasibles como entonces/ callan.
La inobjetable plasticidad verbal que exhibe el estro lírico de la poeta nos sumerge en un alelamiento sólo comparable a esos estados místicos que nos proporciona la contemplación conciente de la naturaleza. La idea de la partida, del no retorno se hace presente en las creaciones literarias de la escritora. Es una idea recurrente. Tal pareciera que fuera una obsesión que adopta múltiples variaciones de un mismo proceso psicológico. Lo que en teoría psicoanalítica se denomina introspección retrospectiva ,es un problema nemotécnico en la escritora para no extraviarse definitivamente durante sus procesos creativos y sus cavilaciones escriturales. Es fascinante toparse con esa especie de filosoficación
temática dentro de la elaboración del poema. Una irreal geografía se impregna en nuestros sentidos viniendo de los versos sensuales y vehementes de la escritora. Podría decirse que su poesía es una melancólica añoranza estacional. El invierno está asociado al río y el verano a la mujer pero de una tal forma que desconcierta el lector. A veces no resulta fácil leer la poesía de Coraspe por su complejidad y su deliberado informalismo.Un inesperado epígrafe de Curzio Malaparte me subsume en un desesperado entusiasmo que jamás he experimentado leyendo poeta alguno. Celebro estos paratextos que la escritora coloca al comienzo de su poemario porque siento que hay una indisoluble afinidad intelectual entre su sensibilidad y poetas universales de reconocida calidad. Leo con inusitada fruición sensitiva este Vértice del Círculo y concluyo (obviamente, conclusión nada concluyente) en la indescriptibilidad de esta poética de Coraspe. Se torna inaprensible y se me vuelve difícil de catalogarla. La escritora profiere: Cómo hablar de lo que no se explica/cómo decirte que invadas la locura vuelvas a tus numerosos nombres al pie de mínima pisada.
Hay un gozo artístico en el solazamiento de lo inefable. Un regusto por la dimensión irracional que habita la razón estética de la autora. Ella piensa su propio pensamiento desde una instancia problematizadora que interroga las preguntas en vez de darle respuestas. Ello complejiza aún más su poesía. La preocupación de nuestra escritora por el problema del tiempo es asunto que atraviesa toda su obra. Infiero que esa especie de "fijación" que trasluce en muchos poemas de sus posteriores libros obedece a la pertinaz y obsecuente vocación trascendentalista que define su escritura. La eternidad, lo intemporal en Teresa Coraspe adopta muchos rostros pero nunca queda soslayado en el abordaje de sus preocupaciones temáticas. Me conmueve la idea del tren que no detiene jamás su marcha como figura literaria que adopta la escritora aunque en ella subyace un sentido pesimista y hasta apocalíptico del devenir; pero aun así me fascina esta idea porque se aviene en concordancia con mi temperamento pesimista de lector escéptico y distraído que presumo ser.

24.06.07 @ 01:32
Rafael : Me puse a revisar tu blog, ahora que no te encuentro por ninguna parte y me sorprendió lo que escribiste sobre Vértice del Círculo, fue una grata sorpresa: ese librito tan extraño y distinto. No puedo sino expresarte mi profundo respeto y agradecimiento; no sabía que habías escrito sobre él. De repente me aparezco en tu blog como un fantasma en la noche; tienes razón me identifico con los poetas, algunos tienen un parecido a mi alma y ellos se acuestan sobre las páginas y me hacen compañía; entonces surge lo maravilloso: la eterna comunión de esas almas en esta vida o en la otra, y frente al espejo nos confundimos. Un abrazo, un beso, Teresa.
PD: Gracias y disculpe el lector esta inmerecida promoción, esa señora poesía, no yo, lo merece.

Friday, June 22, 2007

Al borde de la noche, (dos poemas de Lou)

Si te digo que vengas
que la vida no está en ninguna parte
sino en tus brazos
que por ti tejo y destejo el tiempo
si te digo que vengas que aún te espero
es porque aún te espero.

24.o1.07

EL HUMO

Humo deslizándose
hacia donde el viento lo devuelve y lleva
sin poder detenerlo jamás

va girando
en los confines remotos
desdibujando en el horizonte
signos ciegos
y la noche que cae

es un torbellino de alas asfixiadas

19.06.o7
teresacoraspe@yahoo.com

Thursday, June 21, 2007

EL MOVIMIENTO JUVENIL Y LAS IDEAS: Una mirada desde la filosofía.

Ángel Américo Fernández


Es en el ágora o plaza pública de las antiguas ciudades-estados griegas, donde se encuentra la cuna de los primeros movimientos juveniles orgánicos vertebrados alrededor de un cuerpo de ideas enunciadas desde la perspectiva de un tiempo, de una época, pero también de un cambio de tiempo, de un nuevo ethos o de la praxis creadora de un nuevo espíritu del tiempo. Aparecen unos extraños hijos de Apolo que discurrían sobre el bien, la verdad, la belleza, el alma y la política que fueron llamados filósofos, se ocupaban del saber, eran amantes de la sabiduría.

Faltarían palabras para aquilatar la presencia y dimensión de estos espíritus en la historia de la civilización, pues rebasaban con creces las meras prácticas de la política y la guerra comunes en las primeras sociedades humanas, para indagar e inquirir sobre el mundo desde el lugar del pensamiento desembarazado del mito y de lo mágico-religioso. Poco importa en verdad el criterio meramente cronológico para sopesar la novedad de aquellos pensadores, verdaderos hermeneutas del sentido. Lo importante, lo medular, está en la profundidad fresca de sus ideas, en su pionera e infatigable curiosidad intelectual que los convierte en descubridores de la razón: “reprimiendo siempre todas las pasiones en una tranquilidad perfecta y teniendo siempre la razón por guía, sin separarse nunca de ella, contempla incesantemente lo que es verdadero, divino e inmutable y está por encima de la opinión” (Sócrates en los Diálogos de Platón). Emerge el logos que gobierna las cosas, pero además habían encontrado la veta transhistórica que servirá de hilo conductor a la civilización occidental, se había producido el hallazgo del sabor del saber.

Es en el siglo V AC cuando ocurre aquella explosión de ideas que estremece al mundo griego. El logos toma la palabra, la dialéctica del logos o el logos apalabrado, se inicia la cultura del diálogo, la argumentación ocupa su lugar mientras que el intelecto hace su tarea de filigrana para elaborar y hacer preciso los conceptos, la pasión por la idea (eidos), más allá de la multiforme experiencia de los fenómenos. Ya el mundo no pertenece sólo a la pragmática, se impone un nuevo talante donde el discurso de espesor busca penetrar el ser de las cosas, la mimesis omnicomprensiva pretende atrapar en sus redes al cosmos, estamos ante el nacimiento del Bios Teorétikos.

Por ello se preguntaban ¿Qué es el bien, la Belleza, el Amor, la virtud? Y en la respuesta se encumbra la exquisita idea de diálogo platónico, el diálogo como banquete, el placer por las meras ideas pero en disputa dialéctica para erradicar la falsedad, mostrar lo aporético y hacer aflorar lo verdadero: “Antes de contestarle quisiera saber lo que Cebes tiene que objetarme, a fin de que mientras habla tengamos tiempo de pensar lo que debemos decir. Y después que hallamos escuchado a los dos cederemos si sus razones son buenas” (Sócrates, Diálogos de Platón). Más, se trata de la búsqueda de un orden de verdad que, por tanto no cede ante los artilugios de la retórica en su afán de persuadir en un movimiento guiado por el solo interés con la intención de hacer prevalecer la propia opinión en todo y contra todos por encima de cualquier principio moral. Por ello, Sócrates en aras del diálogo de la verdad con pretensiones de fundamentación, libra una singular batalla para despojar de su máscara a los retóricos. El retórico es un desprestidigitador, un mago de la palabra que puede transformar la verdad en mentira y lo justo en injusto. Contra ello argumenta Sócrates con fina agudeza: “Hay que escoger, en efecto, entre la retórica extraña a la ciencia y a la verdad, que se limita a hacer creer a la plebe ignorante que todo es bueno o malo, justo o injusto, bueno o feo, según la necesidad del momento, un arte pérfido e inmoral…El mayor mal que la retórica puede infligir a quien la ejerce…es cambiarse en el arte de disimular la injusticia” (Platón, Diálogos). Luego Sócrates distingue entre la retórica efectista y el discurso verdadero. A estas alturas de las edades humanas hay que indicar que ha sobrevivido el discurso de la verdad o teorético, pero también la retórica que ahora aparece reencarnada en magos ancestrales, encantadores de serpientes aferrados a la voluntad de poder y hábiles en la manipulación del populus.

Esta es sin lugar a dudas el primer movimiento juvenil de envergadura que marcó un hito en el proceso histórico, cambiaron las ideas y los modos de pensar. Fueron los fundadores de los conceptos maestros que han servido de carta de navegación a la civilización occidental durante siglos. Hablaron de la verdad o la falsedad, lo bello y lo feo, lo justo y lo injusto, lo moral y lo inmoral, lo coherente y lo aporético, de la virtud y de lo sublime. Plantearon problemas epistemológicos, éticos, estéticos y políticos y diseñaron una cierta ética discursiva y de argumentación que entronca con los horizontes de una democracia ideal.

El segundo movimiento juvenil en el tiempo se puede rastrear en el siglo xv Europeo. Es un tiempo complejo, muy móvil y de grandes cambios. El feudalismo agonizaba y los sectores privilegiados de la nobleza feudal debían competir con reyes cada vez más fuertes y con las nuevas clases mercantiles que validan el dinero como factor de poder y acumulaban fortunas como resultado del comercio local y a larga distancia con el oriente. Mientras crecían y prosperaban las ciudades italianas del mediterráneo como Venecia, Génova y Florencia, el imperio Bizantino del oriente era invadido en 1453 por los turcos otomanos que ocuparon la capitalina ciudad de Constantinopla. Muchos sabios, maestros y artistas se desplazan en fuga hacia las ciudades italianas e impactan en una generación de creadores ávida de dar despliegue a las potencias del intelecto. Aquellos sabios traen consigo la sabia del modelo greco-latino de cultura que, junto a la herencia que atesora la propia bota itálica en sus antiguas ruinas y monumentos, germina en un gigantesco movimiento artístico-cultural conocido como Renacimiento y Humanismo.

En la culta ciudad de Florencia se halla el epicentro de este terremoto intelectual. Los nombres prominentes de aquella generación como Miguel Angel, Giotto, Leonardo da Vinci, Dante, Petrarca, entre otros, rompieron definitivamente con la mentalidad teocéntrica medieval e impulsan un movimiento suficientemente autónomo lanzado a recuperar el valor de lo humano por encima de lo divino y que contribuyó dibujar un nuevo tipo de sociedad más individualista, mundana, materialista y pragmática-utilitaria, echando los cimientos del hombre moderno como expresión de la confianza en sus propias fuerzas, en cuanto posibilidades de la razón.

Ya en Petrarca se insinúa por ejemplo el concepto de patria que deja atrás al viejo ligamen del feudo. En los artistas italianos está el encuentro con lo humano en una ruptura con el viejo orden clerical y la influencia monástica, pero además se impone una nueva visión del mundo signada por la evidencia ya definitiva de que las explicaciones no descansarán más en la autoridad aristotélica ni en las lecturas de la iglesia, sino en el canto triunfal de la razón misma. Todavía faltarán tres siglos más de recorrido histórico para dar por completada la conciencia moderna, pero el aporte de esta generación de humanistas es capital para comprender la formación de la modernidad en el plano filosófico y cultural.

Es en la Francia del siglo xviii donde precisamente tendrá lugar la gesta de una nueva generación de intelectuales, filósofos y teóricos de la política. Es, de nuevo, la sangre de los jóvenes que promueven un cambio en los modos de interpelar el mundo. Proponen una red de postulados, conceptos y categorías que sistematizan en obras maestras la entrada de la razón en la historia. La Ilustración o Iluminismo es el nombre del movimiento crítico que encarna de manera palmaria la fiesta triunfal de la razón. La influencia de la novedosa tormenta de ideas no toca solamente el terreno de lo político-social, una verdadera conmoción se produce en el campo de los valores, de la cultura y de la conciencia histórica toda. Se trata, sin lugar a dudas, de la más emblemática revolución en sentido clásico, pues no es reductible al ámbito de lo económico o a la esfera del poder, sino que implica una nueva semiótica, unas nuevas claves de pensar el mundo, una nueva manera de encarar la vida.

De este modo la idea-fuerza de crítica sirvió tanto para desmontar las irracionalidades del absolutismo político, como también para promover una estética y un inédito modelo de comprensión del desarrollo del hombre y el progreso del saber. La sociedad monárquico-absolutista junto a los privilegios de una nobleza parasitaria enganchada al poder y el oscurantismo clerical llegaban a su ocaso. Frente al antiguo postulado de que “la salvación desde ahora, depende de un soberano que para conservar todo, lo tenga todo en su mano”, los iluministas oponen libertad, tolerancia, república, la ley constitucional, soberanía popular y derechos del hombre. La naturaleza dinámica y de ruptura de estos eventos puede leerse como una crisis de la conciencia europea que busca ampliar su horizonte por la vía de la razón para construir una socialidad libertaria condensada en el ideal de ciudadanía. “La mayoría de los franceses pensaba como Bossuet; de repente los franceses piensan como Voltaire: es una revolución”.

Pero además, se asiste a una concepción del sujeto histórico como portador de un destino y realizador de la promesa de felicidad, una concepción de la historia homogénea direccionalizada a realizar el ideal de la razón en el Estado liberal, una idea de progreso alimentada por la iluminación del conocimiento cristalizada en los saberes de la ciencia, una idea de ciudadanía articulada a un contrato constitucional de deberes y derechos, una cierta idea de vanguardia estética que prefigura una élite intelectual como garantía incardinada a la construcción de un nuevo orden racional, una idea de crítica y de espíritu crítico que privilegia la actitud de atreverse a pensar por cuenta propia rompiendo con el tutelaje de autoridades religiosa o políticas, una idea de sociedad desacralizada, es decir despojada del manto religioso y, por tanto, abierta a un proceso siempre renovado de secularización.

En la tarea monumental de escribir una enciclopedia que abordara el vértice de los conocimientos humanos para el siglo xviii y la elaboración de una historia universal, queda plasmada la voluntad intelectual de una pléyade de pensadores jalonados por una sensibilidad y un espíritu crítico a toda prueba que demolieron las costumbres y el conservadurismo imperante. Diderot, D’alambert, Voltaire, Montesquieu entre los enciclopedistas, a los que habría que agregar el nombre del maestro del contrato social moderno Juan Jacobo Rousseau, son algunos de los líderes cimeros de la cultura que da contornos definitivos al discurso filosófico de la modernidad.

Precisamente hija legítima del iluminismo es el movimiento de emancipación de América Hispana que tiene su cuna y principal punto de irradiación en la provincia de Caracas. Allí un grupo de jóvenes pertenecientes a la élite ilustrada de la nobleza territorial criolla se plantea en serio romper definitivamente con las cadenas del coloniaje. En ellos gravita al lado de una muy clara conciencia de clase, una formación ideológica que hunde sus raíces en los grandes textos del siglo de las luces. Rousseau, Montesquieu y el documento de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano son de lectura frecuente entre los conspiradores y objeto común de conversación. Pero igualmente, tienen argumentos de peso relativos a la propia estructura de dominación colonial articulada en un tipo de sociedad en la que “no podíamos ser virreyes, ni gobernadores y, casi ni aún comerciantes”.

En consecuencia, la clase propietaria de la tierra y de los esclavos, se encontraba extrañada del poder político…no podían ejercer la tiranía doméstica. La influencia filosófica y política de la Ilustración se manifiesta hasta en el lenguaje. Hablan de República, soberanía, libertad, abolición de los impuestos, constitución y como dato no menor atacan el monopolio comercial de corte mercantilista que representa una traba para su desarrollo económico y se pronuncian por el principio liberal de libertad de industria y de comercio.

Es en la llamada sociedad patriótica de 1810 donde tiene su partida de nacimiento el movimiento emancipador interpretado como ruptura definitiva. Allí hombres como Bolívar, Miranda, Muñoz Tebar, Coto Paúl, Briceño Méndez, Juan Toro y Juan Germán Roscio, apalancaron el movimiento que condujo a la declaración de independencia venezolana el 5 de Julio de 1811.

Dos grandes movimientos juveniles nacidos de la universidad emblematizan el siglo xx venezolano: el de la generación de 1928 y el de 1957. El primero rompe con el pasado de barbarie al enfrentar la arbitrariedad de la dictadura gomecista; la segunda clama por una Venezuela moderna que asiente definitivamente el imperio de la civilidad y las instituciones; en el primer caso tenemos a un grupo de estudiantes que traslada un problema de la universidad central de Venezuela a una propuesta de modificación del sistema político; en el segundo, asistimos a un intento serio de instaurar una democracia apuntalada en el pluralismo que aglutine a los diversos sectores del país y pueda garantiza la gobernabilidad. La generación del 28 inaugura la calle y la movilización urbana como forma de lucha contra la dictadura; la generación del 57 abre cauces para ensanchar la participación a través del voto universal y secreto. Los jóvenes del 28 como Jóvito Villalba, Pío Tamayo, Gustavo Machado, Rafael Caldera, Rómulo Betancourt, Raúl Leoni, Miguel Otero Silva, Juan Bautista Fuenmayor, entre otros, contribuyeron a la despersonalización del poder, a repensar el país con nuevos conceptos y, de hecho, con ellos se produce la entrada de los cuerpos ideológicos contemporáneos expresados en la social-democracia, el social cristianismo y el marxismo. Los jóvenes del 57 empujan hacia un país de instituciones para cementar la convivencia ciudadana, elecciones libres, la soberanía popular y la alternabilidad. En fin, ambos son expresión conspicua de la vocación democrática del pueblo venezolano, un antídoto contra el militarismo y el autoritarismo, un modo de resolver los vericuetos de la política y del espacio público, completamente alejado de la anarquía y de la tentación personalista.

El movimiento estudiantil alcanza su apoteosis revolucionaria con los acontecimientos del Mayo francés de 1968. Los jóvenes universitarios hijos de una época donde el espíritu de la utopía alimentaba las sensibilidades, se levantan en posición de rebeldía impugnando en principio el anticuado sistema universitario, la precariedad de los fondos destinados y la imposibilidad de dar salidas laborales a los nuevos egresados, pero de inmediato pasan a cuestionar a la sociedad occidental, el autoritarismo, los escasos márgenes de libertad, el engranaje industrial consumista y los imperativos del sistema capitalista regidos por una racionalidad instrumental.

Las universidades de Nanterre y la Sorbona fueron el epicentro de aquella revuelta contestataria que pronto se enlazó con una huelga general de trabajadores hasta el punto de generar una crisis política y un vacío de poder en la Francia gobernada por De Gaulle. No estaban ayunos de ideología ni de discursividad filosófica. Allí gravitaron desde posturas anarquistas que implicaban la abolición de toda autoridad política, económica, cultural o religiosa, pasando por situacionismo exacerbado para apalancar la construcción de situaciones tendentes a desencadenar un juego de acontecimientos, hasta el marxismo crítico de Herbert Marcuse, teórico de la escuela de Francfort. Es de este autor que extraen la crítica a la civilización occidental por estar montada en una racionalidad entre medios y fines o racionalidad instrumental que prefigura la alienación y la cosificación del individuo. “la razón occidental es la lógica de la dominación”. Por ello abogan por una recuperación de la sensorialidad que es aplastada y administrada en el reino de la barbarie del capital. Buena parte de esta influencia se nota en las consignas enarboladas por los estudiantes franceses dotadas de contenido utópico: “sed realistas: pedid lo imposible”, “tomemos el cielo por asalto”, “están comprando tu felicidad: róbala, “el aburrimiento es contrarrevolucionario”, “olvidar lo aprendido, comiencen a soñar”. Independientemente del desenlace posterior que reafirmó el status quo, no cabe la menor duda de que el mayo francés representó el espíritu de una época de sueños y utopías, la sensibilidad de los años 60, el espíritu de la revuelta, la sensación ética, estética y existencial de que se podía cambiar el mundo desde el centro de la voluntad.

En la Venezuela actual se asiste al fenómeno del gran movimiento estudiantil 2007 que moviliza las redes de universidades nacionales. Se genera frente al profundo déficit de democracia que exhibe el actual régimen político del presidente Chávez. Hasta ahora la dinámica del movimiento pone en lisa a una generación, llamada eufemísticamente de Internet o de las cacerolas que, ha saltado al espacio público planteando la defensa de los derechos civiles. Este movimiento, por su sensibilidad, por su frescura, por la naturaleza de su desenvolvimiento, no puede ser leído en el marco de los viejos conceptos y categorías de la cuarta o la quinta república. No puede ubicarse en los rituales y las prácticas políticas formales de la primera, pero tampoco en el discurso marxo-delirante de la segunda.

Es un movimiento que parece alimentar una ruptura con el pasado, pero también con el presente que ya es pasado por su desgaste y anquilosamiento. Todavía es temprano para aquilatar en su justa dimensión la discursividad y campo de irradiación histórico del protagonismo de estos jóvenes, pero una cosa está demasiado clara: se baten contra toda forma de autoritarismo, contra toda vulneración del estado de derecho y contra cualquier tentativa de regreso a prácticas reñidas con la ética. Por lo menos es posible asomar tres cosas: una postura ética irrenunciable, una postura política que implica devolver al país la comunicación y la reconciliación nacional y una vocación de futuro enraizada a los horizontes de una democracia posible. Ante ello bien vale una de las preguntas claves de Kant: ¿Qué podemos esperar? Podemos esperar al menos que el presente movimiento juvenil se constituya en un dique de contención contra el despliegue de una ya declarada agenda autoritaria; que sirva para repensar al país de cara al futuro sin los dogmas ni las prácticas de la vieja derecha ni de la izquierda radical que hace tiempo se quedó sin fundamentos y sin enganche con las nuevas realidades. Es de esperar también una contribución para reconstruir el tejido de la sociedad venezolana y, especialmente, que devuelva la esperanza y el optimismo en nuestras reservas para el porvenir.

Notas

A manera de nota final, es preciso clarificar que el término juvenil no siempre es empleado en este ensayo con un significado cronológico. Muchas veces es usado o vertido como “nueva época”, “nuevas ideas”, “nueva mentalidad” o “pensamiento opuesto a la tradición”. De igual modo, en este trabajo sólo intentamos establecer la conexión entre movimientos fácticos, contexto y discurso ideo-filosófico.
Ciudad Bolívar, Venezuela. (Publicado en otros blogs)

Tuesday, June 19, 2007

Palabras con ZIAC, y NOTAS DE DOMINGO PARA ARRULLAR EL YO.

Dos poemas de Francisco Arévalo (Venezuela)


Hay un lugar donde uno ya no le interesa a nadie
Es el mismo donde las canciones en duermevela son inadvertidas
Hay pasos que nos llevan a descubrir el húmedo lugar de donde venimos
La campana que nos advierte del optimismo que congela
Y una muchacha con la nostalgia en la piel que sabe de la ruta de mis aves
Es un caminar lento que abreva alegría
Te merodea la idiotez donde vives
El suave rincón donde tan sólo escuchas.

NOTAS DE DOMINGO PARA ARRULLAR EL YO


El ego no tiene textura tan sólo acertijos
En la vulgar pirámide del fastidio
Ornamento y devaneos que esconden el fondo de la forma
Y se te pone la piel dulce de gallina cuando respiras en la turbulencia
Manual de buenos modales para nuestros sapos y culebras
Las diminutas intrigas que nos visten de absolutos
La médula cruel que desgarra y nos aparta
Y se nos escapa la otra mejilla frente al espejo
Y no nos quedan días en la indiferencia para zambullirnos.

Ciudad Guayana, Pto. Ordaz, 2007

Saturday, June 16, 2007

TODAS LAS MANZANAS DEL PARAÍSO, DE NINA REIS, (Brasil)

Presentacion de Todas las manzanas del Paraíso, de Nina Reis.
Roberto Bianchi.

Hace casi 10 años comentábamos para su libro Secretos-Segredos, primer poemario de la autora: Nina viaja, sueña con mágicos encuentros. Navega por la piel. Descubríamos entonces una poeta impar, tal vez única en su inmenso Brasil, que lograra enarbolar palabras de colores terrestres, impulsadas por el viento mágico que sopla desde las leyendas, las quimeras, los abismos del alma.
Nina Reis equilibra la tentación de estar entre dos lenguas y múltiples pájaros errantes.
Desde su nido de palabras, cubierta apenas por las nubes del ensueño, nos trae ahora de su mano, las múltiples manzanas que arrancadas del Paraíso, bajaron a beber en le arroyo sutil de su poesía.

CLANDESTINO.
uno ama lo que cree saber.
R.B.
Es cierto que cuando uno ama
busca humedad en las piedras
confronta con el tiempo
un manso parpadeo de aves
y acumula sueños

A veces llora la ausencia
que se derrama por las tardes
en los roces de otros labios
y es larga la espera

Uno sabe bien del frío que invade las mañanas
cuando otros pies suplantan
los que anoche no estaban

Entonces
como un fantasma
uno arde clandestino en su propio cuerpo.

II
CUANDO AMAN LAS MUJERES SON LOBAS
les crecen los colmillos y rechazan las sobras
cuando husmean sus presas no hablan
prefieren recordarlas in memorian

Antes del final
fantasean de águilas
se encaprichan en el aire.
III
HA VIVIDO EL AMOR
en las orillas de la mujer mar
soplado arena en sus montes
desparramado salitre en su cabello
flotado taciturno en las escamas

el amor es un pez
ahogándose en agua

Mínima selección de ese hermoso libro que ha escrito Nina Reis, (Brasil)
y que habría que leerlo todo para darse una idea total del sentir de esta
mujer poeta, que junto a Roberto Bianchi (Uruguay), han creado para todo
poeta, artista, escritor, un mundo donde realmente cabe la creación literaria, como prioridad del espíritu: indudablemente, me refiero al grupo aBrace (solidaridad entre creadores), al cual me es honroso pertenecer como Representante en mi país, Venezuela.
Teresa Coraspe.
PD: hermosa foto de la autora que no supe reproducir y es una disculpa.

Tuesday, June 12, 2007

AÑOS DIFÍCILES, SECUELAS DE UN TIEMPO QUE NOS DEVORA.

(Carta que tiene que ver con lo difícil de un tiempo, y otras cartas
que andan por ahi).

AÑOS DIFÍCILES, SECUELAS DE UN TIEMPO QUE NOS DEVORA.

Teresa Coraspe


Fue cuando nos conocimos, enseguida el problema de Irak y todo lo que siguió, allá, y en todas partes. Luego también, enseguida, el silencio, la espera y, de pronto aparece un poema: "sorpresa" era el Asunto, para seguir la historia del RÍO y la MAR. ¿Esto fue todo?: ¡NO! Hubo demasiadas cosas, tropezones, y hubo un sentir, una afinidad y créeme: sigo siendo la misma en esencia. Quizás una arruga más o un cabello más blanco, pero una sola cara, no existe otra; esto no es así. No puedes confundirte tanto; que pude haberme expresado fuera de contexto, a la ligera, puede ser y lo admito; pero en realidad sigo pensando que la Poesía es otra cosa, más de adentro, más del alma, más de ese lado de misterio que no podemos comprender ni descifrar. ¿Lo social?, existe y es; casi todos los poetas tocan ese lado, pero no como lo quieren otros poetas. No se necesita decir silencio para decir silencio: basta con decir que una boca está sellada, agrietada, para expresar que el silencio es, y está presente. ¿Quién dijo que ÉXTASIS DEL MAR no toca, aparte del amor, un problema político-social? Seguramente ciertos poetas (un momento, que no hablo de ti, en este caso), si no escriben sus poemas diciendo que hay hambre en el mundo y que hay que luchar por la paz y así siguen, no se sienten satisfechos; como si no hubiera una forma más poética de decir lo mismo, pero, a partir de una creación estética. Cito a Edel, Casaus, Manzano y tú inclusive. Lo que cuestiono de muchos escritores y poetas, aparte de que considero escritores a los poetas y su contrario, es su obsesión porque todos escribamos en forma de denuncia; la denuncia puede estar implícita más allá de la forma; puede estar velada con la metáfora, con la imagen; no necesariamente hay que nombrar guerra o hambre en un poema, para autofelicitarnos por nuestra vocación "social". El poema está más allá de esas fronteras, pero ese día no tenía mucho tiempo sino para decirte esto que te escribo ahora; quería sólo saber el color de una breve ausencia; y por supuesto, saber de ti. Quizás me atropelló la impaciencia y me expresé mal. ¿Sabes?, pero tú tienes razón, al fin el silencio siempre ha sido la voz que ha hablado desde el 2003. Hoy le dieron un premio a un cubano, un buen premio; quizás por esto estas palabras; me detuve en la información, no tiene sentido quien sea, pero en el fondo de mi pensamiento, sí lo tiene; en la otra memoria ausente de palabras todo tiene sentido; porque yo viví la ausencia de la voz, la imposibilidad de la comunicación, la angustia de pensar en que algo podría ocurrir de pronto; de pensar o imaginar lo que sólo estaba de este lado de mi vida; porque, del lado de las islas y la mar, habían otras vidas, otros seres, y yo fui, quizás en sueños, a formar parte de esas vidas, de esas gentes, de esos seres. Pero no hay que andar con rodeos, sólo hay que leer e interpretar con lupa, la capa sellada de ÉXTASIS DEL MAR, que tiene un destinatario:

Monday, June 11, 2007

De: ISMAEL SAMBRA, (Poemas del exilio: Soledad perdida con la nieve.

Una mujer en mi exilio
(a mis amigos de aquí y de allá)

Esa mujer que en el subway me mira y se muerde los labios
no me conoce.
Esa mujer me provoca sin conocer mi raza.
Desafía con su escote el invierno
y desborda sus senos.
Está nevando
y esa mujer es capaz de derretir la nieve cuando se abre el
chaleco.
Se ve que tiene carnes que no soportan la tela.
Esa mujer muestra sus piernas perfectas y no sabe que yo amo
lo perfecto.
Esa mujer me mira y no me conoce. No sabe
que soy un recién llegado y que apenas
tengo la palabra beautiful para hablarle.
Es raro
esa mujer siente calor en pleno invierno y no me atrevo.
Esa mujer me mira nuevamente como con ansias de que yo la
siga
y se baja en la próxima estación
sin mirar atrás.

El poeta y escritor cubano Ismael Sambra
reside en Toronto, Canadá.

Tomado de la Revista Sinalefa que dirige
Rafael Bordao.

Sunday, June 10, 2007

Rosana Ordoñez y los compañeros de Jesús Sanoja Hernández

(en la despedida del poeta).
ES TIEMPO DE LLORAR POR VENEZUELA.

En la Avenida Los Jabillos de la Florida se congregaron los principales intelectuales del país. En un rincón conversaba Ramón Jota Velásquez con los hijos de Jóvito Villalba. Más adelante estaba Américo Martín, Manuel Caballero entraba con una boína que trataba de disimular su cabellera y Régulo Pérez hablaba del movimiento cultural.Recordaban la invasión de Machurucuto Héctor Pérez Marcano, Apolinar Martínez, y Ramón Tenorio Sifontes. Héctor Malavé Mata narraba cómo se salvó de un ataque colectivo cuando fue sorprendido por una marcha roja y Pompeyo Márquez exhibía su acostumbrada vitalidad.Pedro León Zapata llegó con su esposa Mara Comerlati y Teodoro Petkoff se enfrascó en análisis económicos con Miguel Rodríguez y su hijo. Miguel Enrique Otero con su hermana Mariana y Simón Alberto Consalvi saludaban discretamente, y otro editor David Natera, del Bloque de Prensa, mostraba su diario guayanés.Los periodistas Carlos Ortega, Luisa Barroso, Jorge Valoz recordaban tiempos de la escuela de comunicación social, mientras Manuel Bermúdez y Rubén Monasterios llamaban la atención con sus dones verbales y la amabilidad de la Caracas vieja.De las nuevas generaciones, ahora ya envejecidas, estaban Argenis Martínez, Ramón Hernández, Manuel Molina Peñaloza, Jerónimo Figueroa. Y entre las muchachas, las hermanas Valentina y Antonia Toro, los hermanos Villalba, Gustavo Marcos, Alejandra y Carlos Alcides Sanoja Villalba.Los hombres se abrazaban con las palmadas que marcan a los caballeros desde la generación del 28 y las mujeres, acompañaban a María Eugenia Villalba de SanojaLuis Alberto Crespo, Ramón Melinkof, José María Cadenas, Adriano González León Elías Pino Iturrieta, Juvencio Pulgar, Ibsen Martínez, Inés Quintero, Eduardo Liendo, Héctor Rodríguez Bauza, Rafael Angel Barreto, renovaban tertulias olvidadas.Nadie del gobierno, de la Cinemateca, de las televisoras del Estado. Antonio García Ponce solitario, su hermano Guillermo tal vez fue a medianoche. Ninguno de los avisos estrambóticos que atapusan los periódicos cuando fallece algún familiar de un Ministro.Pocas coronas, no hacían falta.La flor y nata de la intelectualidad venezolana, de la gente pensante, escritores, productores, narradores y periodistas se congregaban en torno al más grande periodista que haya tenido la Venezuela contemporánea, el profesor Jesús Sanoja Hernández, oriundo de Tumeremo, comunista de corazón, perseguido, exiliado, escritor hasta en los días finales.Su obra no está en los libros, está dispersa en miles de hojas de papel periódico, regada en la páginas de Bohemia, de Elite, de El Nacional, de El Diario de El Caroní. No fue un entierro, fue una fiesta intelectual. Su despedida fue el encuentro con el reto intelectual, el gentilicio y la lucidez. Nadie lloraba, todos lo veneraban con respeto, cariño y admiración. Sanoja tuvo el mejor de los adioses.Comunistas, guerrilleros, presos, exiliados todos con un pasado y un presente de lucha, hablaban de este gobierno tan lejano al sueño que aun mantienen.
(enviado por Francisco Alarcón)
de su web: PUBLICACIONES ALARCÓN.

Saturday, June 09, 2007

Un poema de Gabriel Zaid, (México, 1934)

de: PoeMARTES.

CIRCE

Mi patria está en tus ojos,
mi deber en tus labios.
Pídeme lo que quieras menos que te abandone.
Si naufragaré en tus playas,
si tendido en tu arena
soy un cerdo feliz, soy tuyo,
más no importa.
Soy de este sol que eres,
mi solar está en ti.
Mis lauros en tu dicha,
mi hacienda en tus haberes.

Circe/ Gabriel Zaid [México, 1934]

Un poema de PAULINA VINDERMAN, (Tomado de la REVISTA SESAM, Nº 74

LA MUERTE DE LA IMAGINACIÓN

"Lo que más temo es la muerte de la imaginación."
Sylvia Plath

El corazón no tiene quien le escriba,
nadie se atreve a cruzar la noche remando
en la intemperie
(nadie se ve)
Y si no fue más que un amor negro, susurrante
que nada da,
el viaje más lejano fue el de mi cabeza
hacia su hombro
(el más inútil)
La rama golpea en la terraza
pero es solamente oscura.
El miedo se sienta a comer un pastel en la cocina

(y dice que es real)
¿Alguien pudo tocar a la desesperación?
Terciopelo, papel de diario, una lata oxidada,
no hay vacuna contra las superficies.
El mundo es un hueco tapado con barniz

(y no respira.)

PAULINA VINDERMAN nació en Buenos Aires en 1944. Es traductora de inglés y coordinadora de talleres literarios. También es doctora en bioquímica.

Sinceras gracias por el envío de la REVISTA SESAM
teresacoraspe@cantv.net

Thursday, June 07, 2007

Un poema de Francisco Arévalo

BERLIOTZ CON LLUVIA

Aquí estoy
Alistándome con la luz preñada de rutina
Los ruidos en los rincones y sus diminutos moradores
No me hablen de esos animales del mar
Que se han sembrado sin certezas en la tierra
Mis nubes escandalosas que abarrotan la anchura
El brillo de una herencia que se fija en las paredes
Esta distancia que disloca
Yo que he enamorado la incertidumbre
Y ya no me perturba
Capturado la esencia a un lado del hervidero y sus pinchazos
He sido crucial y y rotundo con la desdicha
La mayoría la convierte en misterio que colapsa las horas
Mi hija Alondra recoge sus pajaritos en la mañana
Se persigna y pide a Dios que no me pase nada
Mi nena sabe que un cuarto de hotel me llega a la piel con su trajín
Esa fijación en la sala de baño y esos amores que no han dejado rastros.


BREVES DE LOU

LA GATA.

Cuando salgo
no ando en búsqueda de nada
ni para lucir atuendos
o vestidos de gala
tampoco exhibirme
en las vitrinas comerciales
o confiterías
prefiero
quedarme encerrada en la casa
como una gata
sobre la alfombra
donde entierra sus uñas
y siente placer
arañándose
a sí misma.

5.6.2007 T.C.
teresacoraspe@cantve.net

Tuesday, June 05, 2007

UNAS BREVES PALABRAS SOBRE EUNICE ODIO

Unas breves palabras sobre EUNICE ODIO
(a solicitud del poeta Daniel Montoly)

Supe de Eunice Odio justamente el año en que salió publicado mi
primer libro: “Las Fieras se dan golpes de pecho”. Una hermosa
y bien documentada Antología acababa de publicar la Editorial
venezolana Monte Ávila Editores, junio, 1975, donde hay una
recopilación de ensayos de varios escritores latinoamericanos,
donde sobresale la voz de Juan Liscano, amigo y conocedor de
la poesía de Eunice, así como receptor de muchas cartas y
escritos de la autora; correspondencia que data desde febrero
de 1965 hasta 1974 (año de su muerte), en México. Vecinos y
amigos les extrañaba que tenían más de una semana
sin verla, hasta que decidieron avisas a las autoridades
y al forzar la puerta la encuentran sentada en su bañera;
había muerto, según las investigaciones, diez días antes.
Escucharla fue un deslumbramiento, cuando en su variada
Correspondencia con el también poeta y ensayista venezolano,
describe anécdotas de la vida diaria y cotidiana que ella
interpretaba como signos de una realidad otra donde lo
místico tenía cabida y la percepción extrasensorial, se le
manifestaba aún en los instantes en que guardaba verduras
y hortalizas en su refrigerador. Como lectora de ese tiempo
me encontraba sumergida en su mundo irreal y fantasmagórico
donde descansa la fuerza de su poesía profunda y reveladora
de una cultura universal.
Nace Eunice Odio en Costa Rica en 1922 y desaparece en
medio de una gran soledad en el país de los aztecas. No ha
sido sino hasta hoy cuando revisando mi biblioteca, me
encuentro con los ojos verdísimos de Eunice en la portada
de la Antología ya descrita. De pronto recuerdo la solicitud
hecha el año anterior por Daniel Montoly y reviso algunas
notas, entre ellas las de Carlos Zerner, quien consideraba
a Eunice Odio, como: “la mejor poeta americana de este
siglo”.
La Antología, (tan bien cuidada por Liscano) nos trae
ilustraciones de fotos maravillosas, donde se destaca
la belleza de una mujer que fue bella en exceso, pero
en la que jamás lo físico pudo opacar la
belleza espiritual que nos deja en su poesía, escritos y
cartas.
Hay muchas anotaciones sobre el tránsito de la escritora
por este lado del cosmos: Los elementos terrestres, El
tránsito del Fuego, Poemas publicados en Zona Franca,
revista que dirigía Juan Liscano en Venezuela.
Sólo deseo dejar una muestra de su poesía, que es extensa,
con muchos versos cada poema y porque se trata de
un blog para lectura rápida, los incluiré, lamentablemente
en fragmentos.

El umbral se me cayó de los ojos -niño ciego-
me quedé con la mirada y el recuerdo de una isla.
E.O.

De: ARGOS DEL DÍA OCULTO:

Argos, Argos, escucha:
He venido a saber,
a preguntar de árbol a árbol entre los dioses.

Te pregunto por el amor, porque he dormido bajo tus ojos;
pregunto por el rumor del cuerpo abierto;
pregunto tras la puerta velada de par en par;
pregunto delante de ella en presencia mía…


¿Ves la hora que se fue sin tocarme la lengua,
ni la mar,
ni el abril que vendrá
conmigo reflejada entre sus ondas,
entre sus ojos…

EN EL BOSQUE (fragmento)

Se va, se irá, siempre se ha ido,
abandonando calles invencibles,
meses deshabitados,
casas cerradas por el tiempo verde.
Se irá, se fue,
haciendo compañía
a todo aquello que contiene el aire
de fronteras difusas,
y espumas prolongadas hasta el canto;
haciendo compañía
a todo lo que vive
llevado por el espacio.
Y abandonado por los frutos del mar, del sol, del viento.
Por lo que da la Tierra
girando sobre su éxtasis;
por lo que no se dijo jamás eternamente….

Ciudad Bolivar, Venezuela, madrugada del 4 de abril, 2007
Teresa Coraspe.

Breves de LOU

Mareíta mareíta
no te me vayas tan lejos
ven y déjame reposar
mis cabellos sobre
tus ondas
Llévame a ras de tus
aguas
como el viento te lleva
y
mece sobre mi cuerpo
el cabrito que
tienes dentro
así con los sonidos
que escucho
cuando caes sobre las arenas
y vas y regresas
de nuevo
incesantemente
sin cansarte

Lou, 4.6.2007
Gracias por no perderte.

Monday, June 04, 2007

PANTALLA TOTAL Y RESPUESTA TÁCTIL

Ángel Américo Fernández



La metáfora Pantalla Total acuñada por el filósofo francés Jean Baudrillard sirve para ilustrar el descomunal peso de la televisión en los tiempos de la sociedad posmodernizada hasta el punto de que se ha declarado en los cenáculos de la comunicología que lo que no sale en la televisión sencillamente no existe. La televisión ciertamente no es un simple medio trasmisor de lo que acontece en la realidad, no es un simple emisor, sino que genera, crea y hace proliferar efectos de verdad y de realidad que rebasan en mucho los acontecimientos cotidianos o aquellos que podemos percibir o leer directamente con el mero apoyo de nuestros sentidos.

Es tal la carga de signos, significados y valores que puede vehicular la televisión que ella en si misma forma parte del arsenal de estrategias fatales para el control de los territorios existenciales y la subjetividad del ser humano. Por ello, en vista de que no la podemos suprimir, es necesario dotarse de ciertos antídotos para minimizar sus daños pensables o posibles. Uno de los antídotos que emerge con fuerza propia es el de la pluralidad. Cuando uno de los vectores o polos de la totalidad social ejerce el control absoluto de la televisión, el otro o los otros son reducidos al silencio, negados o sencillamente dejan de existir en sus voces y referencias en las reglas tecno-comunicacionales de la sociedad posmoderna.

El caso del cierre de Radio Caracas Televisión está lejos de ser un asunto de lógica jurídico formal. Se trata nada menos que de la más seria acción del régimen de turno por avanzar desde el terreno del Estado al territorio de la sociedad civil. Se trata de ir ahora por el control de los seres humanos, de los cuerpos y las mentes para funcionalizarlos en aras de un proyecto político hegemónico. Esto, por supuesto no es nada nuevo, el teniente coronel ya lo había anunciado desde Diciembre y recientemente se ocupó del contenido de su obra con una lluvia de citas de Gramsci. Este marxista italiano es el autor que profundizó en el concepto de hegemonía para intentar superar las explicaciones mecanicistas y dogmáticas del marxismo soviético. Pensaba que una revolución socialista no podía prosperar con el solo control del aparato del Estado y que era preciso hegemonizar la sociedad civil toda para imponer los valores, sistemas de creencias y la nueva cultura socialista. Su punto de partida está sesgado y es totalitario, pues supone como premisa un grupo de iluminados que conducirían a la sociedad por el camino del “bien” aglutinados en un pensamiento único.

De modo que esa es la carrera que emprende el régimen depredador donde el cierre de RCTV es un eslabón importante, pero forma parte de un amplio abanico incardinado a la ley habilitante, la reforma constitucional con la consabida reelección indefinida y el partido único.

Sin embargo, el teniente coronel elegido presidente al parecer no calibró debidamente la posibilidad de la reacción de la sociedad civil y, en especial, la actitud crítica y de protesta firme asumida por el fresco sector de los estudiantes. Se produjo una reacción táctil no en el sentido de fragilidad de conciencia, sino en la naturaleza epidérmica, capilar y de suyo automática en un sector que en estos años de depredación no había asumido una posición orgánica y de visibilidad frente a los desmanes del gobierno. Es también táctil porque no ocurre contra un discurso, una política pública o un cambio en el esquema constitucional, sino contra una acción concreta que tiene efectos visibles, inmediatos y materiales por el desplazamiento del poder a nivel crudo y sangrante. Desde luego, no es lo mismo oír una charla de dictadura o enterarse de ella por los periódicos que cuando la dictadura se mete dentro de tu casa y te despoja de una opción en el menú de posibilidades, te quita el control y hace angosta la libertad de elegir, disminuye severamente la libertad de expresión, al tiempo que deja a oscuras a un grueso sector de la opinión y el pensamiento nacional que no tiene cabida en los canales del gobierno.

La acción de protesta estudiantil, aparte de las formas posmodernas que reviste, sin grandes capitanes, sin grandes comandos, sin enfrentar a los cuerpos de seguridad y con redes tecnológicas que utilizan para desplegarse y comunicarse, viene dotada de una discursividad que hace énfasis en la defensa de los derechos civiles y enarbola el carácter indiviso de la libertad. Pero además, hace suya el desvestimiento del régimen con consignas que no tienen desperdicio: “pueblo madura esto es dictadura”.

Pensamos que Venezuela ha llegado a un punto crucial y de quiebre en relación al proyecto de poder de Chávez, porque queda planteado el siguiente dilema: o el gobierno ceja en sus intentos de construir una hegemonía totalitaria o adopta la represión a fondo y despiadada públicamente establecida contra la sociedad civil ya parada en formación de resistencia y dispuesta a evitar la muerte de sus derechos y hasta de su propio pensamiento.

Sunday, June 03, 2007

MAIAKOVSKI ( 1893-1930 )

LIBERTAD DE EXPRESIÓN
VLADIMIR MAIAKOVSKI

La primera noche
ellos se acercan y cogen una flor
de nuestro jardín,
y no decimos nada.
La segunda noche
ya no se esconden
pisan las flores,
matan nuestro perro
y no decimos nada.
Hasta que un día
el más frágil de ellos
entra sólo en nuestra casa,
nos roba la luna,
y conociendo nuestro miedo
nos arranca la voz de la garganta.
Y porque no dijimos nada
ya no podemos decir nada..

Vladimir Maiakovski. Poeta ruso soviético (1893-1930) que terminó pegándose un tiro cuando se dió cuenta de que no había hombre libre en el socialismo soviético, sino una nueva forma de esclavitud: La del pensamiento.

Saturday, June 02, 2007

UNA MUJER SE ALEJA DESCALZA ENTRE LA BRUMA DE LA TARDE



UNA MUJER SE ALEJA DESCALZA ENTRE LA BRUMA DE LA TARDE

(palabras que pretenden ser un poema)

a JORGE BOUSOÑO GONZÁLEZ

Voy caminando sobre las espinas abiertas de la tarde
con el grito apretado entre mis labios
quiero verlo estallar y romper este silencio
que aturde y se adhiere entre la piel.
El abismo de la nada (que sé dónde queda)
enseña su ojo y dientes afilados
no podía proseguir no podía
busqué y he buscado sin encontrar jamás
el lado de tu rostro que diseñé con el barro de la espera
No es fácil, no lo era, construir con hierros encendidos
alrededor
y las distancias dispuestas a cercarnos
para borrar las huellas insomnes
yo deseaba fusionar dos vidas entre una
yo anhelaba lo que no era posible
yo quería la lentitud de tu mirada en la mañana despierta
vagué buscando una respuesta
y la desesperación fue el logro tatuado entre mis hombros
así anduve poseída por la inconformidad y el desasosiego
en medio de una desesperación delirante
Presentí que las cenizas apagarían tus ojos y los míos
Encendí la hoguera con el mismo cansancio de mis pasos en el recuerdo
al cansancio de tus pies
era la forma de borrarte de borrarnos
la respuesta no habla en absoluto de ti
me niego a descifrarlo
Vino la lluvia y un viento incontenible en el tapiz de la ventana
observé los árboles furiosos y las piedras que una a una caían
entre mi boca las mastiqué lentamente
tanto que las fui transformando en arena que hacía sangrar mis labios
Nada era extraño y sí lo era: una mujer se aleja descalza por la tarde
es mayo que también se va se pierde en la tristeza
Quizás una sonrisa un rictus de dolor
así se va al origen de las cosas idas
ella, como siempre, regresa a la inversa de su sombra.

1º de Junio, 2007

Friday, June 01, 2007

Dos poemas de FRANCISCO ARÉVALO -Venezuela-

PALABRAS DE MAYO EN GEORGETOWN


Hoy es un día de paraguas y sonidos desconocidos
Donde los collares de la tarde se visten escurridizos
La fresca herradura colonial en los rostros de las casas
Y tantos caminos que llevan a una fiesta de frutos abiertos al sol
El riesgo de la distancia que no distingue porvenir
Esa gota melancólica que hace agujeros en el desvarío
Los atuendos floridos que acercan a tus señas XIO
Cierta rebelión con sabor a jengibre que toca las entrañas
Puerto España la dejé estancada en el aliento de sus cayenas
La sombra de la despedida
Y tu jardín que persigue el blanco en sus rincones
Regusto por el escandaloso mediodìa donde me urge contrincante
El hotel y su pasillo de abstracciones que me siembran calor reflexivo
Dramàtico espejo luminoso cuando el olvido no toma camino
Aquì se funden las pisadas del cordial silencio
Mi hombro de guerrero diestro en perder esplendorosas batallas
La tranquilidad que agota lo venidero
Y un derroche de flores en los extremos que tiñen los párpados
Hay amores que se guardan en las esquinas
Mientras un contingente de pájaros indica el río que reclama retorno
La búsqueda de lo femenino que se diluye
Tanto pesimismo en los labios de una muerte que no llega al cielo
No sè en que momento tus manos se fueron con el desencuentro
Y esas palabras que ya no llegan en tu sexo y melodía
La nada es un misterio que calma la exactitud de tus pechos
El castillo derrumbado en las enredaderas del amanecer
Donde cavilo
Un azul derramado que esconde en sus pliegues mis traviesos fantasmas.


SABADO CON INSECTOS

Se entra desnudo a la palabra
La ambigüedad de esta noche y sus sabores que se fijan en la piel
El sedimento que busca el preciso tratado para hinchar el sueño
Abril era la puerta de entrada al desespero
Esta tenacidad por lo desconocido que me viste de susto
En mi camino de vértebras tu retoño
Y la ilusión que tus semillas llegaran a mis manos
El corazón que late en los caminos de la cúrcuma
Están en la azotea los adoradores con sus pasos de rito
Aridos como la boca de un anciano sabio
A mi diestra un cesto de cayenas que pulverizan bostezos
La vara con que mido mis impertinencias
Para resbalar en la cólera tropical que empuja esta oscuridad con insectos
Es cuando me falta la destreza que filtra tu mirada
La voz de tu arroyo en los pasillos de mi sangre.

Georgetown 19 de mayo 2007.