A QUÉ HUELE…
La emoción de nuestra llegada a visitar la familia paterna, transcurre entre alegrías y sorpresas pero empezaba a surgir aquel olor característico que nos invitaba a sumergirnos en él, para descubrirlo.
Observar a mi hermana con sus gestos faciales propios de su edad rechazar el aroma que percibíamos; era lo que indicaba, que habíamos llegado.
Ahora, cierro mis ojos y atraigo ese olor a mi olfato para tratar de buscar la semejanza con otro y solo puedo decir que huele a una mezcla extraña como viejo, pero fresco y a un aroma que desprende la comida, pero no le llego… A qué huele…
Muchas veces para recordar esos momentos y retroceder en el tiempo, lo invoco y logra transportarme. Allí estoy, entrado por esa puerta de madera con cerradura desgastada; bajo un escalón y me recibe ese aroma a familia, sigo penetrando en mis recuerdos y entro a la cocina, ver a mi abuela con su traje largo marrón de tela gruesa, muy gruesa por el frío, su pañuelito en la cabeza combinado con su tez blanca, está riéndose, sus manos con venas pronunciadas y de las que dicen lo mucho que han trabajado.
Me asomo por una pequeña ventana y observo el huerto verde muy verde y ese olor que me persigue pero me gusta porque me siento allí con ellos.
Ahora quiero quedarme con ese olor y mis vivos pensamientos, ya no quiero saber a que huele porque se puede acabar el encanto del recuerdo.
La emoción de nuestra llegada a visitar la familia paterna, transcurre entre alegrías y sorpresas pero empezaba a surgir aquel olor característico que nos invitaba a sumergirnos en él, para descubrirlo.
Observar a mi hermana con sus gestos faciales propios de su edad rechazar el aroma que percibíamos; era lo que indicaba, que habíamos llegado.
Ahora, cierro mis ojos y atraigo ese olor a mi olfato para tratar de buscar la semejanza con otro y solo puedo decir que huele a una mezcla extraña como viejo, pero fresco y a un aroma que desprende la comida, pero no le llego… A qué huele…
Muchas veces para recordar esos momentos y retroceder en el tiempo, lo invoco y logra transportarme. Allí estoy, entrado por esa puerta de madera con cerradura desgastada; bajo un escalón y me recibe ese aroma a familia, sigo penetrando en mis recuerdos y entro a la cocina, ver a mi abuela con su traje largo marrón de tela gruesa, muy gruesa por el frío, su pañuelito en la cabeza combinado con su tez blanca, está riéndose, sus manos con venas pronunciadas y de las que dicen lo mucho que han trabajado.
Me asomo por una pequeña ventana y observo el huerto verde muy verde y ese olor que me persigue pero me gusta porque me siento allí con ellos.
Ahora quiero quedarme con ese olor y mis vivos pensamientos, ya no quiero saber a que huele porque se puede acabar el encanto del recuerdo.
Nelcia Saccia, Ciudad Bolívar-Venezuela, Talleres en el Museo de Arte Moderno "Jesús Soto", dictado por Teresa Coraspe, Junio, 2010.
4 comments:
Hola Teresa!
Pasé a visitar tu casa y me encontre con la sorpresa de nuevas escritoras. Qué bueno el apoyo que les brindas.
Un besote!
Quería escribirte a tu correo, pero no lo vi.El mío: giraluna27@gmail.com
Volveré a visitarte a tu casita!
Profesora Teresa. Gracias por honrarme colocando mi escrito en su blog. Agradecida por su apoyo y estímulo. Un abrazo!
Nelsa Ciaccia
La verdad Teresa, como siempre tu casa invita a conocer voces nuevas, aromas diferentes, pero tal vez tan conocidos como el escrito que acabo de leer.
Felicitaciones a las talleristas...y si me lo permiten, hacen concurso de belleza para entrar al taller, una poeta más bella que otra.
Saludos Gabriela.
Amigas: les escribí y parece que no lo subí; bueno, cosas que pasan. Gracias a Giraluna por sus palabras, le decía que me regalara un poco del girar de la luna para opacarme lo triste de esta tarde. A gabi que, sí, hay que inscribirse en un concurso de belleza y pasar todas las pruebas para entrar al taller; así que ve y empieza a ser bella por fuera,tal como lo eres aunque en verdad me interesa la belleza de adentro, la interna. Ojalá estas talleristas sigan probando el licor agridulce de la poesía.
A Girasol que me puede escribir a mi correo: teresacoraspe@gmail.com
Neccia, Isabella y Maega,estoy a la orden en mi casa, también a Enoé.
Un abrazo. Teresa.
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